La actriz y cantante neoyorquina, JLo, celebra medio siglo de edad en la carretera, con su gira “It’s my party: The live celebration”, aunque hará un alto en el tour para festejar con sus seres queridos
MADRID.- Jennifer López lleva casi tres décadas de profesión, más de dos en lo más alto y cumple mañana 50 años con una agenda profesional a rebosar.
A lo largo de su carrera, la artista ha publicado ocho discos de estudio, ha protagonizado varias películas, ha sido juez de uno de los “talent shows” de mayor audiencia, ha llenado con su espectáculo-residencia de tres años en Las Vegas y ha lanzado su propia firma de cosmética.
Pero antes de llegar a este punto, Jennifer Lynn López Rodríguez era una chica de barrio.
Sus padres son de origen puertorriqueño y López y sus dos hermanas nacieron en el barrio neoyorkino del Bronx. Sus padres querían que López estudiase una carrera universitaria tradicional, pero ella tenía otros planes: quería bailar, cantar y actuar, según recoge la revista Hello! Sus pasos pronto se encaminaron en esa dirección.
CAMINO AL ESTRELLATO
Con apenas 17 años, se inscribió en la Manhattan’s Dance Studio y dividía sus esfuerzos entre el estudio de baile y el instituto.
A principios de la década de los noventa fue elegida como bailarina en un show televisivo. En 1997, dio vida a Selena Quintanilla, una cantante que murió asesinada, y fue nominada a un Globo de Oro por su actuación. Ese papel fue determinante para su meteórica carrera. Según recordó la propia López a un medio estadounidense, echaba de menos bailar y cantar y compartirlo en directo con el público.
La idea era tener una carrera en la que compaginase las tres disciplinas que más le gustaban.
López fichó por Sony Records y, en 1998, comenzó a trabajar en su primer álbum: “On the Six”.
Su carta de presentación fue “If you had my love” y su éxito fue inmediato e internacional. De esto hace ahora 20 años.
En 1999, López grabó una canción con Marc Anthony, con el que se casó varios años más tarde y padre de los dos hijos de la cantante.
Pero, en aquel momento, si hubo amor a primera vista, no cuajó como relación. En ese año, López llevaba un año divorciada del cubano Ojani Noa y mantenía una relación con el polémico rapero, Sean Combs, más conocido como P. Diddy y, después, Puff Daddy.
A los albores del nuevo milenio con su éxito “Waiting for tonight” sonando en todas las radios, la pareja fue arrestada por su supuesta relación con un tiroteo en un club de la Gran Manzana.
López fue puesta en libertad casi de inmediato y Daddy fue exonerado de todos los cargos más tarde. En 2001, la pareja rompió su relación definitivamente y ese mismo año, López se casó con el coreógrafo Cris Judd, un matrimonio que solo duró unos meses.
Su siguiente pareja conocida fue el actor Ben Affleck, con el que mantuvo una relación hasta 2004, cuando se casó con Marc Anthony, del que se separó en 2011.
Tras Anthony, López salió con el bailarín Casper Smart, con el que rompió en 2014.
ORGULLOSA DE SUS RAÍCES
J.Lo, como se conoce a la cantante, siempre se ha mostrado orgullosa de sus raíces latinas y humildes en el Bronx.
En la canción “Jenny from the block”, lanzada en 2002, los reivindicó abiertamente: “Todavía soy Jenny, del barrio. Solía tener poco, ahora tengo mucho. No importa a donde vaya, sé de dónde vengo. ¡Del Bronx!”.
En su última película “A second act”, López interpreta a Maya, una trabajadora en una gran superficie que organiza reuniones solo para mujeres en la sección de muebles de exterior, vive en el extrarradio y batalla con la confianza en sí misma.
“Crecí y viví en Bronx hasta mis 20 años, así que entiendo esa vida”, dijo a Vanity Fair.
“He tenido la suerte de crecer para convertirme en otra cosa pero, al mismo tiempo, esas raíces se quedan contigo. Interpretar estos papeles es una oportunidad para volver al centro de lo que soy”, añadió al medio.
El nacimiento de sus mellizos, Emme y Maximiliam, fruto de su relación con Anthony, supuso un momento de inflexión para la cantante.
“Cuanto tuve a mis hijos me di cuenta de que tenía que mejorar y crecer como persona, no solo por ellos, sino también por mí. ¿Cómo puedo enseñarles cómo deben tratarse si yo permito que las personas me traten a mí de una manera que no es nada agradable? ¿Cómo puedo enseñarles a trabajar duro si yo no lo hago? Comencé a examinarme desde muchos ángulos”, comentaba la cantante a un medio estadounidense.
En muchas ocasiones, en sus 20 años de carrera, ha tenido que enfrentarse al lado malo de la fama: acoso de la prensa, rumores, incursiones en su vida privada, etc.
Incluso, según ella mismo declaró, se daba una imagen de ella que no correspondía con la realidad. En este sentido, la polifacética neoyorkina aseguró que participar como jurado en “American Idol”, ”me dio la oportunidad de que la gente la conociese un poco más”, recogía en unas declaraciones.
A sus 50 años, Jennifer López sigue cosechando éxitos en la música y en el cine y está a punto de casarse con su novio actual, el exjugador de béisbol Álex Rodríguez.
También deja ver su lado más feminista y reivindicativo: «Este momento para las mujeres es una revolución emocional y espiritual que está afectado al mundo». Mientras, 50 años caen, y a la vez sus trabajos y proyectos no paran de crecer.
EL DATO:
En la canción “Jenny from the block”, lanzada en 2002, los reivindicó abiertamente sus orígenes: “Todavía soy Jenny, del barrio. Solía tener poco, ahora tengo mucho. No importa a donde vaya, sé de dónde vengo. ¡Del Bronx!”.
En su última película “A second act”, López interpreta a Maya, una trabajadora en una gran superficie que organiza reuniones solo para mujeres en la sección de muebles de exterior, vive en el extrarradio y batalla con la confianza en sí misma.
“Cuanto tuve a mis hijos me di cuenta de que tenía que mejorar y crecer como persona, no solo por ellos, sino también por mí. ¿Cómo puedo enseñarles cómo deben tratarse si yo permito que las personas me traten a mí de una manera que no es nada agradable?”, comentaba en un medio estadounidense.
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