BARAHONEROS DESARROLLISTAS EN 1970

POR: VIRGILIO GAUTREAUX P.

Como  hemos visto en otras entregas, la lucha de los barahoneros reclamando obras fundamentales para el desarrollo de nuestra provincia, ha sido incansable. Pocos años después de nuestra independencia los reducidos habitantes del poblado luchaban forzosamente por levantar su comunidad, constituida en ese entonces en un caserío. Esas demandas reiteradas paulatinamente fueron logrando su objetivo. Ya para de 1881 se eleva la categoría de Barahona y se le otorgan ventajas de tipo aduanero a su puerto.

Las demandas desarrollistas de nuestros antepasados, se dejaron sentir en los salones congresionales y palaciegos en los años finales del siglo XIX y a principios del siglo XX. La sinergia entre la iniciativa privada y los funcionarios locales, posibilitó grandes avances para la zona, especialmente luego de la instalación del ingenio Barahona, el establecimiento de sucursales bancarias y la expansión de las exportaciones de café, maderas, productos agropecuarios yeso y sal. Un vigoroso comercio y emprendedores  hombres de negocios, contribuyeron al extraordinario crecimiento económico, social y urbano que experimentó la provincia por espacio de unos 50 años.

Cambios en la economía mundial e internos restaron competitividad a Barahona, la cual no sobrevivió a las nuevas corrientes del comercio internacional, además del poco apoyo que recibió de diferentes gobiernos.

En un Comunicado de fecha 5 de Mayo de 1970,  unos 63 compueblanos y compueblanas altamente preocupados por la crisis que azotaba la provincia, aprovechando el período electoral,  le expresaban al Presidente Joaquín Balaguer, su agradecimiento al mandatario por haber aceptado la petición que le formularon un grupo de damas barahoneras de que construyera la carretera Barahona-Azua-Baní.  Señalaban que el largo y difícil trayecto hasta la capital, restaba competitividad a los bienes agropecuarios de la zona.

Más adelante apuntaban “nuestras tierras son aptas, además del plátano y el café-renglones de vital importancia en la economía del país-de hortalizas y cítricos (tomates, repollo, berenjenas, ajíes, toronjas, guandules, etc.), cuya explotación no ha podido incrementarse para fines de mercado fuera de nuestro radio, por el costo de los fletes y el deterioro que origina la distancia”.

Luego señalaban que era de conocimiento pleno del Ejecutivo las atracciones turísticas del litoral barahonero, las cuales les serían aumentadas con el trazado de una autopista que cruzaran las lomas del Curro develarían ante el viajero el majestuoso panorama de la Bahía de Neyba. A esto añadían otros atractivos regionales tales como el Lago Enriquillo, la mina de Bauxita en Cabo Rojo y la laguna de Oviedo, entre otros lugares.

Casi finalizando manifestaban: “Tenemos la creencia de que esta obra acortaría la distancia Barahona-Santo Domingo en unas dos horas y beneficiaría no sólo a Barahona,  sino a todos los pueblos enclavados en las provincias que componen nuestro Sur, ya que lograría un  efectivo intercambio social y comercial”.

Como se estaba en plena campaña electoral los barahoneros conocedores de que muchas promesas en esos períodos no se cumplen, quisieron comprometer al Presidente Balaguer tomándole la palabra, para lo cual destacaron: “Tal como lo ordenara Usted a la Comisión que elevó esta petición, hemos dado a la publicidad la realización de esta obra como inicio de su nuevo mandato presidencial”.

Esta suspicacia encubierta en alabanzas se originaba a que en otras ocasiones se habían realizado diferentes anuncios de obras que no se iniciaban o el traslado de las operaciones portuarias de la empresa Sal y Yeso

Los firmantes del Comunicado fueron:

Esta y otras obras se lograron que se construyeran en los años sucesivos. Otros gobiernos posteriores realizaron también obras de importancia para la región. Para esos años los funcionarios locales eran activos desarrollistas comprometidos con el empuje de Barahona. El empresariado local y la sociedad civil de la provincia, impulsaba esta sinergia.

Actualmente -en apreciación de muchos- se requiere que el funcionariato local barahonero dé un  paso al frente y encabece la cruzada de asuntos relevantes para impulsar el ansiado despegue económico de nuestra provincia.

Miles de compueblanos quieren verlos dando puñetazos en los escritorios de los Ministerios de la capital reclamando recursos para Barahona, tal  y como lo hacen los funcionarios del Cibao, Mao, Higuey, San Cristóbal, Puerto Plata y San Pedro de Macorís.

Somos muchos los que estamos dispuestos a apoyarlos (ir con ellos) cuando vengan a reclamar a los funcionarios de la capital maquinarias, equipos, computadoras o apoyo   presupuestario. Queremos hacerle coro para evitar que todo se concentre en la capital y el Cibao.

Esperamos su llamado !!!!!!!