
Por el Dr. Rafael Leonidas Pérez y Pérez.
Castorcito, inspector de Rentas Internas con asiento en Duvergé, acechaba a las mujeres comerciantes duvergenses, cuando regresaban con sus mercancías en sus cabalgaduras desde Neiba por el camino de El Salado de la Tuna, para cobrarles impuestos y ellas para evadirlo, se desviaban de ruta.
Castorcito, no oriundo de Duvergé, era un hombre a un sombrero pegado.
Solía con un limpiabotas, limpiar sus zapatos, una larga fila de calzados; en el parque central de la ciudad de Duvergé, cerca de un perfumador chachá por donde llegó a vivir Messin Sarraff.
Cuando la Era de Trujillo, por Pedernales apareció muerto Castorcito.
Esa muerte causó en Duvergé por lo bajo, rumor lleno de interrogantes y más…
Fuente: Testimonio dado a quien esto escribe por Rafael Antonio Pérez y Pérez, en Santo Domingo, D.N., el 1 de noviembre de 2021.
